El dinero del baloncesto chino

Hace pocas semanas, Leon Rodgers hacía las maletas y ponía rumbo a China. Los suculentos sueldos que allí se pagan han sido la principal razón de su marcha a Oriente. Rodgers, un jugador completísimo con una amplia hoja de servicios en diferentes clubs europeos, estuvo en la órbita del Fuenlabrada la pasada campaña. Excelente atleta, este alero, que también puede desempeñar funciones de cuatro, rindió a gran nivel la pasada campaña en Alemania, adonde llegó tras un breve paso por Ucrania, después de ser uno de los mejores, quizá el mejor, jugador del historia del basket holandés.

Ahora la suerte será para el público chino, que va a disfrutar sin duda con la actuaciones de un hombre que llegó a ser mvp de la ULEB dos jornadas en la temporada 2006-07. Sus mates, triples y penetraciones a canasta tienen nuevo lugar donde ser vistos. De momento, promedia 29 puntos por partido, 7 menos que otro viejo conocido, Gabe Mouneke.

Considero que Rodgers tiene más calidad que la ofrecida por el país oriental. No obstante, la corta vida profesional de este tipo de deportistas unida a la situación de crisis mundial, hace completamente comprensible su decisión.

Las normas de la liga en la que se acaba de embarcar limitan la presencia en cancha de los foráneos a una serie de minutos. Esperemos que Rodgers no se canse mucho y que cuando termine su periplo por tierras lejanas esté en plena forma para regresar a su sitio, Europa. Ojalá sea España.